[Reseña] Ryusoulger 38-40

Este Año Nuevo perdí las reseñas que tenía preparadas y tuve que recomenzar de cero. ¿Y saben qué? Ha sido una bendición; me ha permitido intentar un nuevo enfoque en mis críticas.
Allá va la reseña de los capítulos 38, 39 y 40 de Kishiryu Sentai Ryusoulger.

 

#38 - El templo en el cielo

(En el primer borrador me equivoqué y puse «El castillo en el cielo»)

Los Ryusoulger necesitan poder para vencer a los Druidon y siguen un mapa que les dio Setô en el 37. Así llegan a un templo flotante que decide teleportar solamente a los dos «machos alfa»: Kô y Canalo. Ryusoul Red y Ryusoul Gold se tendrán que enfrentar a representaciones virtuales de los Kishiryu que ya conocen. Es un poco como cuando en un videojuego llegas a esa parte previa al gran final donde tienes que volver a luchar contra los Bosses de zona anteriores. La diferencia es que Canalo pelea con los menos importantes en escenarios interiores —a la vuelta de donde luego encontrará la espada— y Kô irá a exteriores, como un señor.

Kô se enfrenta a un doble de Tyramigo en una pelea que recuerda al inicio de Zyuden Sentai Kyoryuger. A continuación, el doble de Dimevolcano le hará una pregunta con más profundidad de lo que parece:

«¿Qué antepondrías? ¿A tus camaradas o a tu misión?»

Es una decisión muy dura. A mí me hicieron hace bastante tiempo una pregunta similar y no es algo que se pueda decidir al instante. En mi caso, me hacían elegir entre su amistad o su colaboración en proyectos en común. Luego supe que en realidad una de las dos personas que me lo preguntaron me quería lejos, y el ultimátum era una trampa para crear un conflicto con el otro, mi amigo.

Aquí también se produce un conflicto, pues Kô eligió comprometerse con sus camaradas y Canalo con su misión. Pero la guardiana del templo es superfán de Kô y le da la oportunidad para que pruebe que se compromete de veras con su respuesta: ¡ambos tendrán que luchar!

Los chicos se entienden la situación enseguida, y después de un par de piruetas dejan de pelear. De este modo, Kô antepone a sus camaradas por encima de su misión, y Canalo antepone su misión... porque su misión es conseguir la espada.
 

El gran poder que obtienen es la Ryusoul Calibur, una mítica espada que libera el poder latente. Supongo que la creó el mismo científico prehistórico que creó la armadura Gaisorg; es decir, Valma. Este personaje aparecía en la película de Ryusoulger, un mediometraje ambientado en la prehistoria que todavía no hemos podido ver en español. En esencia, Valma creaba armas y se le subió el poder a la cabeza. Su hija, Yuno, reaparece en este capítulo 38 como un holograma programado para guiar a los buscadores de poder. Pero ya dije que es superfán de Kô, y cuando los chicos se van, murmura: «Sabía que lo conseguirías, Kô.» ¡Menos mal que nadie más consiguió la espada en 65 millones de años!

Mientras tanto, el resto de Ryusoulgers se tienen que coordinar sin Red ni Gold para hacer frente a un peligroso oponente: el Minosaurio Caribdis. Se basa en una criatura de la mitología griega que originaba un remolino mortal. Los navíos que trataban de evitar a Caribdis impactaban contra Escila, monstruo que personificaba los acantilados del estrecho de Mesina. ¿Qué eliges, Escila o Caribdis?

Este Minusaurio es el segundo nacido de un Druidon. Su anfitrión no es otro que el mismísimo Gachileus, que, forzado por Pricious, recurrió de esta forma a su último as en la manga. Sabiendo que para poder volver gigante al monstruo debía alimentarlo con su propia energía negativa, Gachileus ordena a Kreon que lo insulte. ¡Kreon lo goza! Es una de esas escenas donde el último secundario se convierte en el jefe de la escena. ¡Por fin se desfoga!

Me gusta que en este episodio los Ryusoulgers sigan siendo un escuadrón eficiente aun sin los rangers de mayor protagonismo. ¿Cómo hubiera sido esta serie sin Kô ni Canalo? Lamentablemente, nunca lo sabremos, porque los dos aparecen en plena batalla y destruyen al enemigo con la Ryusoul Calibur. Es un arma tan poderosa que puede destruir a un Minusaurio aunque ya sea gigante. ¡Eso sí, primero el Red y ya después el Gold! ¡El Red es el que tiene que catar todo primero, no sea que se gaste el poder!

Llegamos a la recta final de la temporada. Canalo se queda preocupado, pensando en las últimas palabras de Yuno:

«Ahora vendrán los verdaderos desafíos. Superadlos juntos.»

#39 - Nochebuena robada

El episodio navideño de este año tiene menos relleno que el de Lupinranger VS Patranger.

Es una trama sencilla y amable, con el secuestro de un repartidor de Doki Doki Pizza —aquel negocio de Go-Onger—, el posible romance de Bamba con una profesora de preescolar —Sailor Venus— y los adorables Kishiryu aprendiendo por primera vez quién es Santa Claus. Creo que se disfruta más si ni siquiera sabes el argumento. Un entretenimiento tierno y festivo, sin más. Por esta semana, dejan todas las complejidades al final del primer arco en Kamen Rider Zero-One.

Lo único reseñable que pasa —dentro de continuidad— es la espectacular batalla final contra Gachileus. Ya era hora.

#40 - Pesadilla en la niebla

Ryusoul Blue despierta de una pesadilla. Es el regreso de un antiguo sueño recurrente, donde un horrible Minusaurio solía perseguir a un joven Melto. ¿Por qué este sueño volvió?

Por su parte, Ryusoul Gold vuelve a recibir noticias de Mosa Rex. Al parecer, bajo el lecho marino se están moviendo unas energías inquietantes. En la base «Disco Fashion» de Wyzul, Pricious revela que todo es parte de su plan; incluso el hecho de que los Ryusoulgers fueran prestos a conseguir la espada Ryusoul Calibur. ¡Todo sirve al inminente despertar del gran Eras! Bajo la superficie terrestre, una especie de corazón Druidon aprisionado late vengativo.

Kreon, siempre el último mono, no sabía nada de esto. Hace lo que puede. Sin embargo, casi sin querer, provoca uno de los conflictos más interesantes de toda la temporada. Encuentra abandonado en un vulgar almacén el famoso espejo maldito que te muestra tu muerte. Echando sobre el espejo su limo verde, nace el terrorífico Minusaurio Satán. El Minusaurio Satán es un repintado de Ultimate Dai-Satan, el monstruo que vimos en el especial de 4 semanas que inició esta temporada. A su vez, éste era una nueva versión de Dai-Satan, el enemigo final de Kyoryu Sentai Zyuranger, el primer Super Sentai de dinosaurios. Cuando se filtraron imágenes de la grabación de este capítulo, hubo quien pensó que Dai-Satan retornaría después de casi 30 años para ser una vez más el «Big Bad». Pero según parece, si el repintado de Ultimate Dai-Satan ya ha servido como monstruo de la semana, el gran Eras no se parecerá en nada a él.

En realidad, el que la apariencia del Minusaurio Satán sea un traje reciclado está justificado. Es una coincidencia. Al inicio del episodio ni siquiera tiene cuerpo; era una niebla misteriosa que se colaba en todas partes a través de los espejos. Pero Melto había vuelto a tener aquel sueño con el monstruo que daba tanto miedo, y el Minusaurio tomó su forma... para más placer.

Este monstruo reciclado arrinconará a nuestros héroes utilizando sus temores hasta que toman una resolución: dejarán de centrarse tanto en aquello que temen perder, y tendrán más fe en sus vínculos. Con confianza, no perderán el equilibrio y nadie podrá aprovecharse de ellos. Una gran lección que siempre hay que recuperar. Dicen que Super Sentai es más infantil que Kamen Rider, pero en momentos como estos me parece un contenido más profundo que cuando en Zero-One tratan de distraerme con tramas enrevesadas de acciones bursátiles.

Hablando de reciclados, me da la impresión de que este episodio se escribió para Halloween. Su temática de terror cuadra más que el que se emitió al final de octubre, donde lo único terrorífico era el momento en que el rencor de Gaisorg trataba de poseer a Ryusoul Red. Otra razón para dudar de que el guion sea reciente está en la duda de Ryusoul Black. Bamba solía ser el desconfiado del grupo. Ver cómo se arrepiente por un segundo de haber aceptado nuevos amigos es algo extraño.

De todas formas es un giro interesante. Interesante y necesario estos días. Una de las cosas que más me fascina de Kishiryu Sentai Ryusoulger es que donde otros ven relleno, yo veo la emisión de la historia perfecta para cada semana. Cuando los miedos de mi vida cotidiana empiezan a ponerse pesados, Ryusoulger me muestra que no son más que una niebla que no me deja ver lo que hay detrás. En esta sociedad donde nos fuerzan a desconfiar como Bamba, necesitamos un Kô que nos haga renovar nuestros vínculos con las personas que nos importan. Es cierto que hace pocos meses se pasaron un poco con las tramas casaderas de Canalo, pero en general, conmigo se están portando muy bien. Casi parece que van estructurando la serie según lo que necesito ver cada semana.

En el próximo episodio: ¡Saden, el repintado de Uden!

Rayos...